La devoción por la virgen de la Merced, patrona de Latacunga y protectora de la ciudad frente a las erupciones del volcán Cotopaxi en Ecuador, motiva a cientos de personas a participar en la tradicional fiesta de la Mama Negra.
Esta singular celebración es organizada en septiembre por los devotos y comerciantes de los mercados de La Merced, Pichincha, Cerrado y El Salto, quienes en conjunto la representan con un desfile de comparsas con coloridos personajes que trasmiten alegría por las calles de la capital de la provincia de Cotopaxi.
La fiesta de la Mama Negra se celebra desde desde 1742, luego de una erupción del Cotopaxi. Se da en dos fechas, tradicionalmente los días 23 y 24 de septiembre y el primer fin de semana de noviembre, por las fiestas de independencia de Latacunga. Tuvo su pausa por la pandemia. La fiesta de la Mama Negra inclusive es desde el 2005 Patrimonio Cultural Inmaterial del Ecuador.
El festejo de septiembre ya está en marcha, ya están casi listos los trajes y toda la devoción que une a familias del sector y fieles de otras localidades, como muestra de agradecimiento a la virgen de la Merced por los favores recibidos a lo largo del año.
Están prestos para salir a las calles los personajes principales de la comparsa, además de la Mama Negra, como el Capitán, el Ángel de la Estrella, el Abanderado, el Rey Moro y el Embajador. Todos ellos llevan una escolta de danzantes.
Su vínculo con el coloso
En recuerdo a las 300 víctimas de una reactivación del volcán Cotopaxi, se celebra la fiesta de la Mama Negra.
Esther Acuña, historiadora latacungueña, dice que al despertar del volcán Cotopaxi por el año 1792 en San Vicente Mártir de Tacvnga se produce un hecho milagroso que marcaría la esencia cultural del pueblo latacungueño.
Cuenta la historiadora que ante la furia del coloso, los habitantes de aquel entonces salieron en peregrinación reconciliadora, proclamando como patrona del volcán a la virgen de la Merced para que ella interceda para aplacar la furia terrible del volcán. Lo hizo.
“Es en virtud de lo acontecido que se jura celebrar en su honor y por eso cada año locales y extranjeros nos visitan para juntos hacer posible la fiesta de la Mama Negra en homenaje a la virgen y su primer milagro con el volcán Cotopaxi”, asegura la historiadora Acuña.
Cada año en los meses de septiembre y noviembre en las calles de Latacunga se vive una fiesta desbordante.
En Latacunga, el festejo es toda una tradición en donde hermanos, primos, sobrinos y demás familiares devotos de la virgen asumen los personajes de la comparsa de la Mama Negra. Víctor Quevedo, este 2022 cumplirá 28 años de vestirse como uno de ellos. Él comenta que antes de la pandemia llegó a vestirse como una de las dos mamas negras que participan en la celebración.
Destaca que fue su madre quien le pidió que asumiera esa responsabilidad a los 18 años, tras la muerte de su padre. Desde entonces con su traje colorido cabalga en su caballo por las estrechas calles de Latacunga, acompañado de una de sus hijas, la más pequeña.
“Para nosotros es una bendición festejar con la Mama Negra para así acompañar a la virgen de la Merced. Somos y estamos firmes gracias a la bondad de ella. Hoy por hoy vivo agradecido por cada una de sus bendiciones y es más por eso que participo esta fiesta”, expresa.
Al igual que años anteriores, este no será la excepción para que Víctor participe del evento pero cree necesario reservarse el nombre del personaje, para sorpresa de los espectadores.
La Mama Negra de septiembre tiene personajes elegidos por los comerciantes y por tradición. En cambio, para la de noviembre es el Concejo Cantonal de Latacunga a la persona que representará a la Mama Negra y los otros personajes.
Elaboración de trajes
Mariana Olmedo y Luis Ayo, son los artesanos que con fe y mucho amor elaboran los trajes de los personajes.
La originalidad de la celebración de la fiesta de la Mama Negra es que cada uno de los priostes trabaje desde abril hasta agosto en la confección de sus propios trajes. Mariana Olmedo ha dedicado 50 años de su vida a esa labor.
En su taller cose con hilo y una aguja las cintas y bambalinas que adornan los trajes de la yumbada para entregar a sus nietos. También tiene la vestimenta de la carishina, que en la comparsa acompaña al huaco o el brujo que realiza las limpias con yerbas y el ashanguero, con una canasta llena de alimentos.
En su puesto de trabajo, Edgar Moreno alista el traje y la bandera con cuadros de colores. Representa al Capitán que heredó como una tradición de sus abuelos. Hace cinco años fue nominado por las vivanderas del mercado La Merced como Capitán. “Vestiré hasta que la santísima Virgen me dé vida, caso contrario pasará a manos de mi hijo”, dice.
En otro taller cercano, Luis Mayo apura el trabajo. Él moldea los sombreros del Ángel de la Estrella y de la yumbada, que son 25 parejas que bailarán con sus trajes rosados, rojo, azul, amarillo y más colores. Durante 30 años viste a sus hijos y nietos que intervienen en la celebración.
Personajes principales
- Mama Negra. Representada por un hombre que se viste de mujer con la cara pintada de negro y lleva en sus manos una muñeca que representa a su hija Baltazara.
- Ángel de la Estrella. Viste de blanco, va sobre un caballo, lleva alas y una estrella en su mano.
- Rey Moro. Un rey con traje multicolor.
- El Capitán. Un hombre que viste traje militar.
- Abanderado. Viste de militar y ondea una bandera.
