POR JOSÉ OLMOS, DIRECTOR DE TURISEC
El sol cae perpendicular y se refleja en la arena blanca y en las aguas color turquesa de playa Mansa, al extremo este de la playa de Tortuga Bay, en la isla Santa Cruz, uno los íconos para el turismo en Galápagos.
El escenario, que se extiende apenas por unos cien metros de largo, tiene una importante carga de turistas el segundo viernes de marzo de 2024. Hay un grupo de unos 30 niños, con sus padres y maestros de un plantel educativo de Quito. Están varios grupos de familiares y amigos, unos cuantos extranjeros; más allá, un grupo practica kayac. En un rezago de playa, que está libre, toma sol una iguana y dos aves juguetean.
El espacio está rodeado de cactus gigantes, de manglar y de pequeños árboles, que los visitantes usan como sombra, como colgadero de mochilas o ropas y para treparse en sus ramas y tomarse fotos como recuerdo de su viaje de turismo en Galápagos.
Esa acumulación de personas hace que se asemeje a una playa continental de Ecuador en un día feriado.
Tasa para asustar a visitantes
Cientos de turistas llegan en los vuelos diarios hacia los aeropuertos de Baltra, en la foto, y San Cristóbal.
Esa llegada masiva de turistas ha sido citada como base para el alza de la tasa de ingreso a Galápagos, de 6 a 30 dólares, para los ecuatorianos, y de 100 a 200 dólares, para los extranjeros, medida adoptada a fines de febrero por el Consejo de Gobierno de Régimen Especial de Galápagos.
El incremento busca "promover un modelo de turismo acorde a las acciones de conservación, que ya se emprenden, y estabilizar el número de turistas que llegan a la provincia insular", según el Consejo de Gobierno de Galápagos.
El ministro de Turismo, Niels Olsen, justificó su votó a favor del incremento de 26 dólares porque "el turismo masivo está afectando a Galápagos".
El alza, solución parcial
En la isla Baltra opera la empresa de buses Lobito que lleva a los visitantes desde el aeropuerto la Canal de Itabaca.
Pero en los últimos 5 años, el alza de tarifas en servicios, imposición de nuevas tasas y otros rubros directamente dirigidos a los turistas, no ha incidido en lo mínimo en la estabilización de llegadas de visitantes a las islas.
Por eso que, una vez aprobada el alza de la tasa de ingreso, algunas voces de ambientalistas señalaron que era solo una medida parcial, que era necesario establecer un plan técnico para frenar la masificación del turismo, que pondría en riesgo el hábitat de las especies del territorio de Galápagos, reconocido por la Unesco como Patrimonio Natural de la Humanidad.
Turistas nacionales y extranjeros saben que el presupuesto para ir a las islas es alto y lo financian. Otros, especialmente ecuatorianos, se dejan llevar por viajeros que se dicen influencers, por portales de negocios turísticos que enseñan "cómo viajar a Galápagos con poco dinero" o que "viajar a Galápagos por tu cuenta es barato".
A ello se suman las “promociones” en vuelos, alojamiento mediante plataformas como Airbnb, que incluso en las islas opera sin reglamento como lo hace en el continente. Hacen tours a sitios cercanos a Santa Cruz y San Cristóbal que son de acceso gratuito, sin guía y se da la saturación.
Cifras que suben y suben
El incremento en las cifras es evidente del 2022 al 2023. En 2022, el Parque Nacional Galápagos registró el ingreso de 267.688 visitantes y se lo tomó como símbolo de recuperación del turismo luego de la pandemia, pues en 2019 se contabilizaron 271.000 ingresos.
Las cifras del 2023, en cambio, reflejan el récord histórico de 304.185 turistas que visitaron las islas solo de enero a noviembre, según detalla el mismo organismo. Llegaron 36.497 turistas más, un 11.9% adicional con relación al 2022, solo en once meses.
Las cifras también dan cuenta de una variación notable en cuanto al arribo de visitantes nacionales, comparando entre los años 2019 y 2022. En ese periodo se dio un incremento del 38% (+33.506 turistas), mientras la llegada de extranjeros tuvo una reducción del 20% (-37.056 turistas).
La tendencia siguió entre 2022 y los 11 meses del 2023. En el primero, del total de llegadas, el 54,3% corresponden a extranjeros (145.445 turistas), frente a un 45,7% de arribos turísticos nacionales (122.243 turistas).
En 2023, 163.476, el 53,7%, fueron extranjeros; los nacionales subieron a 140.709, el 46,3%.
Algunas cifras de 2022 (PNG)
Informe de 2022
Sitios cercanos
San Cristóbal
Santa Cruz
Los nacionales, a sitios gratis
El Canal de Itabaca separa las islas Baltra y Santa Cruz, en Galápagos. El cruce se realiza en embarcaciones tipo ferri.
Las cifras del Parque Nacional Galápagos sobre las visitas de turismo a Galápagos en 2022 dan cuenta de que los turistas nacionales son mayoría en aquellos atractivos cercanos a Santa Cruz y San Cristóbal, a donde hay vuelos directos desde el continente; mientras, los extranjeros hacen mayoría en los de Isabela, pues se requiere de movilización interislas adicional.
En Santa Cruz, un 30% de las visitas a los sitios cercanos se concentraron en la playa Tortuga Bay, adonde hicieron su ingreso 450 personas, en dos horas de la mañana del segundo viernes de marzo de 2024. Se da cuenta en el informe que en el 2022 ingresaron allá 153.372, casi un tercio de las 439.000 visitas a toda la isla.
San Cristóbal tuvo ese mismo año, 225.000 visitas a sitios cercanos a los centros poblados. El cerro Tijeretas es el que más ecuatorianos recibe, 27.891, frente a los 23.741 de extranjeros y 3.185 locales.
En Isabela se registran 107.000 visitas. El sitio con más movimiento fue el Centro de Crianza Arnaldo Tupiza, que superó los 33 mil visitantes, cuya mayoría (75%) corresponde a extranjeros, seguido de Circuito Muro con más de 29 mil visitantes, la mayoría también fueron extranjeros (64%). En el centro de crianza lidera las visitas, pese a que hay que pagar, por servicio de guianza obligatoria, 10 dólares por persona.
El alza de la tasa equivale a cuatro almuerzos o cinco cervezas
La lancha interistas (blanca) queda a 20 metros del muelle. El trasbordó en los botes vale un dólar por persona.
En Galápagos todo cuesta más del doble del continente. Y quien viaja allá, está o debe estar consciente de aquello. En el caso de los turistas ecuatorianos, el alza de la tasa de ingreso de 6 a 30 dólares significaría poco, si se compara con los pagos que se hacen, unos por obligación legal, por decisión de los ofertantes o porque se quiere tener una buena estadía.
Bien se puede decir que al pagar los 24 dólares dejarían de tomar cinco cervezas o no comerían cuatro almuerzos.
Muy a parte de que el almuerzo más económico cuesta 5 dólares ($, 2,75 en el continente) o una gaseosa personal en botella vale 2 dólares (50 centavos de dólar en el continente), hay pagos obligados y otros que los residentes en las islas los han vuelto exigencia. Es el caso de las lanchas que cobran un dólar para llevar del muelle a la embarcación que hace viajes interislas.
Cuando la marea está alta, la interislas bien puede acoderarse en el muelle y los pasajeros embarcarían más cómodos. Pero no. Se coloca a 10 metros y la pequeña recorre menos de un minuto con los pasajeros, del muelle al ferri. Reglas son reglas y así está establecido.
En estos viajes también cobran los GADs, pese a que estos reciben su porcentaje de la tasa de ingreso de 6 dólares que subirá a 30 dólares en agosto próximo. Como tasa, para salir e ingresar por mar, en Santa Cruz se cancelan 5 dólares, en el muelle. Un dólar cuesta esa tasa en Isabela; San Cristóbal no cobra aún.
Detallamos aquí algunos de aquellos valores que actualmente se cancelan:
Tarjeta de Control de Tránsito:
Valor, 20 dólares. Esta se paga en los aeropuertos de Guayaquil o Quito.
Tasa de entrada al área protegida de Galápagos
Cuesta 6 dólares, pero se aumentará a 30 dólares (Los extranjeros pagan 100 y deberán cancelar 200 dólares).
Bus de enlace
Si va a Santa Cruz, para ir del aeropuerto de Baltra al Canal de Itabaca los buses de transportes Lobito cobran 5 dólares por persona. El trayecto dura 10 minutos.
Cruce del canal
El viaje de 3 minutos en ferry o lancha tiene un costo de un dólar.
Del canal hasta Santa Cruz
Los buses cobran 5 dólares por persona, mientras una camioneta cobra 25 dólares por un viaje con cuatro ocupantes. Este costo es por trayecto.
Viaje interislas
De Santa Cruz a Isabela o San Cristóbal, 30 dólares por pasajero y por ruta, más la tasa de 5 dólares si va de Santa Cruz a Isabela, y un dólar para ingresar a esta última isla.
Un turista expone su vida al cruzar la barrera y colocarse al filo de la grieta para hacer fotos. El guía se descuidó.
Obligación de ir con guía
En Santa Cruz hay dos sitios en los que solo se permite el acceso con acompañamiento de guía turístico, cuyo costo es de 10 dólares por persona, por una hora de paseo. Es para cuidar el hábitat y las especies.
Sin embargo, en los recorridos se siguen dando incidentes, como aquel que sucedió el segundo domingo de marzo, cuando un visitantes cruzó la barrera de protección para hacer fotos al filo de un peñasco, en Las Grietas. Hay otros hechos evidenciados con fotos y videos.
Uno es el Centro de Crianza Fausto Llerena, en Puerto Ayora, sitio donde se encuentra la famosa tortuga ‘Solitario George' embalsamado, y Las Grietas, una formación rocosa formada por la actividad volcánica donde hay unas pozas para bucear y ver una variedad de peces.
En Isabela, se cobra esa cantidad en el Centro de Crianza Arnaldo Tupiza, donde hay tortugas y otras especies.
En San Cristóbal se cobra desde este mes los 10 dólares de guianza en el sector Puerto Chino.
Tours en las islas
Un tour navegable, de 07:00 a 16:00, a zonas alejadas de Puerto Ayora o San Cristóbal cuesta de 130 a 150 dólares por persona.
Uno de cuatro horas por mar a zonas cercanas a Santa Cruz, durante cuatro horas, 30 dólares por persona.
Un viaje en camioneta, máximo cuatro personas, a atractivos terrestres de Santa Cruz, 30 dólares. (I)
