La crisis energética que enfrenta Ecuador ha provocado desafíos significativos en diversos sectores de la economía, siendo el turismo y los servicios, unos de los más afectados. El país, que históricamente ha dependido en gran medida de su riqueza natural y su atractivo turístico, ahora se enfrenta a interrupciones en la infraestructura energética, afectando tanto a los operadores como a los visitantes.
Contexto de la crisis energética
En los últimos meses, Ecuador ha experimentado un déficit en el suministro de energía debido a diversos factores, entre ellos la reducción de la generación hidroeléctrica por problemas climáticos, la falta de mantenimiento en las redes eléctricas y la creciente demanda energética sin un plan de expansión adecuado.
Estas interrupciones han tenido un efecto cascada en otros sectores, especialmente el turismo.
Impacto en el sector turístico
El turismo en Ecuador depende en gran medida de una infraestructura confiable para ofrecer experiencias de calidad a los visitantes. Hoteles, restaurantes, operadores de transporte y atracciones turísticas han reportado interrupciones en su funcionamiento normal debido a cortes de energía. Esto ha afectado la calidad de los servicios y, en algunos casos, ha llevado a la cancelación de reservas o insatisfacción de los turistas.
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- Hoteles y alojamiento: Los cortes de energía han dificultado la operatividad de muchos hoteles, especialmente en áreas rurales donde la infraestructura es menos robusta. La falta de electricidad afecta servicios básicos como la calefacción, aire acondicionado, y la conectividad a internet, esenciales para los turistas internacionales.
- Transporte: Los transportes públicos y privados también se ven afectados, con dificultades para la carga de vehículos eléctricos o problemas en el funcionamiento de las estaciones de combustible debido a fallas eléctricas.
Impacto en el sector servicios
Además del turismo, los servicios relacionados, como la gastronomía, agencias de viajes y tiendas de recuerdos, también sufren las consecuencias de la crisis energética.
Las pequeñas y medianas empresas (pymes) del sector servicios son particularmente vulnerables, ya que no tienen acceso a generadores de energía o recursos para mitigar las interrupciones. La falta de electricidad afecta directamente la capacidad de estos negocios para operar eficientemente.
Consecuencias económicas
La reducción en la calidad de los servicios turísticos y el aumento de costos asociados a la implementación de soluciones temporales (como el uso de generadores de emergencia) ha generado un impacto directo en las finanzas de las empresas. Además, la reputación de Ecuador como destino turístico se ha visto afectado, lo que llevaría a una disminución de las visitas internacionales.
El Riobamba se realizó un mapping, poco antes de que se agravara la crisis energética en todo el Ecuador.
Propuestas de solución
A corto plazo, el gobierno debe priorizar la estabilidad de la red energética para las principales zonas turísticas del país. Inversiones en infraestructura y la adopción de energías renovables pueden ser una solución sostenible a largo plazo. A nivel empresarial, el sector turístico podría beneficiarse de programas de financiamiento para la adquisición de generadores de energía y sistemas de energía solar.
Reto significativo para el sector
La crisis energética en Ecuador representa un reto significativo para el sector turístico y de servicios, pero también una oportunidad para repensar el modelo energético del país y buscar soluciones más sostenibles y resilientes. Garantizar un suministro eléctrico confiable será clave para proteger la economía turística y mejorar la experiencia de los visitantes, asegurando que Ecuador siga siendo un destino competitivo en el mercado global.
La crisis energética y otros factores, como la inseguridad y la inestabilidad económica, están afectando gravemente al sector turístico en Ecuador, con una reducción significativa en el número de visitantes tanto a nivel nacional como en las islas Galápagos.
En términos generales, Ecuador ha perdido más de un millón de turistas en los últimos cinco años. Mientras que en 2018 se recibieron 1.9 millones de visitantes, en 2023 esta cifra cayó a solo 863,000. La situación en 2024 sigue siendo desalentadora, con una reducción del 20% en la llegada de turistas en comparación con el año anterior. Durante los primeros cinco meses de 2024, el ingreso de turistas cayó en porcentajes alarmantes: 22% en enero, 25% en febrero y cifras más moderadas en los meses siguientes.
En Galápagos, uno de los principales destinos turísticos de Ecuador, la situación no es mejor. En el primer semestre de 2024, las visitas disminuyeron en un 14.2%, lo que refleja la incertidumbre creada por la inseguridad en el país y las advertencias de los mercados emisores. Los turistas extranjeros aún representan la mayor parte de las visitas, pero la desaceleración en las reservas es evidente.
Desafíos requieren respuesta
El impacto no solo se refleja en la llegada de turistas, sino también en la ocupación hotelera, que se mantiene por debajo del 35% a nivel nacional, y en el caso de algunas provincias como Guayas, está por debajo del 30%.
La caída en la actividad turística ha afectado también a otros sectores, como los restaurantes, de los cuales el 75% reporta estar estancado o en deterioro debido a la crisis energética, la delincuencia y los apagones frecuentes.
Estos desafíos requieren una respuesta coordinada entre el gobierno y el sector privado para promover Ecuador como un destino seguro y atractivo, ya que la falta de una estrategia clara y conjunta está permitiendo que otros países de la región, como Colombia y Perú, capitalicen el mal momento que vive Ecuador.
Estrategias frente a la crisis energética que vive el Ecuador
Transición a energía renovable
mplementar soluciones de energía renovable como la solar y la eólica en infraestructuras turísticas, especialmente en zonas alejadas como Galápagos, la Amazonía y áreas rurales. Esto garantizará un suministro energético constante y sostenible, además de proyectar una imagen ecoamigable hacia los turistas internacionales, alineada con las tendencias de turismo responsable.
Fomentar eficiencia energética
Desarrollar campañas de concienciación y capacitación para los operadores turísticos sobre la eficiencia energética. Incentivar la inversión en tecnología de bajo consumo como sistemas de iluminación LED, controladores automáticos de energía y electrodomésticos eficientes.
Uso de generadores y baterías
Proveer líneas de financiamiento o subvenciones para que las empresas del sector adquieran generadores de respaldo o baterías solares. Esto sería clave para mantener la operatividad de hoteles, restaurantes y otros servicios durante los cortes de energía.
Estrategias frente a la inseguridad en el país
- Creación de zonas turísticas seguras
Promover áreas turísticas seguras con un fuerte control de seguridad, como Galápagos, la Amazonía, y la región andina, sur y costa. Estas zonas deben estar bien protegidas y contar con presencia policial o privada. La imagen de seguridad es esencial para restaurar la confianza de los turistas, por lo que se deben hacer esfuerzos comunicativos para mostrar que Ecuador tiene áreas seguras para el turismo - Implementación de tecnología para la seguridad
Invertir en tecnología de vigilancia como cámaras de seguridad, drones y sistemas de alerta temprana en zonas turísticas. Los operadores pueden asociarse con las autoridades locales para garantizar la seguridad de los visitantes mediante la utilización de estas tecnologías. - Alianzas público-privadas
Establecer mesas de trabajo entre el gobierno, el sector privado y las fuerzas de seguridad para desarrollar un plan conjunto que aborde la inseguridad. Estos esfuerzos deben enfocarse en implementar medidas rápidas, como el aumento de patrullas policiales y la instalación de sistemas de seguridad en hoteles y atracciones turísticas.
Sector turístico de Manta, ciudad que se vuelve resiliente.
4. Promoción de campañas de turismo seguro
Lanzar campañas internacionales que promuevan Ecuador como un destino seguro, focalizando el marketing en destinos que ya tienen bajas tasas de criminalidad. Colaborar con agencias internacionales para destacar los esfuerzos en seguridad y garantizar que los turistas potenciales vean a Ecuador como una opción confiable.
Estas estrategias apuntan a mitigar los efectos negativos de la crisis y preparar al sector turístico de Ecuador para adaptarse a las nuevas realidades, manteniendo su competitividad en el mercado internacional. (I)