Pedro Pablo Duart fue gobernador del Guayas entre el 2019 y 2020, en la etapa más dura de la pandemia del COVID-19. Por eso, dice saber cómo trabajar en momentos difíciles, como los que vive la ciudad por la delincuencia, que afecta a la imagen y al turismo porteño.
Cree que es necesario que los guayaquileños se adueñen de las calles y espacios públicos. Ofrece beneficios tributarios para potenciar los negocios turísticos; volverlo más turístico al río Guayas y hacer un rescate del casco histórico. Ofrece aerovía gratuita de lunes a viernes y los fines de semana viajes con precios cómodos.
Estos aspectos se lo esbozaron en una entrevista, que será parte de una serie de diálogos que mantendrá www.turisec.com con aspirantes a alcaldes y prefectos de jurisdicciones turísticas del Ecuador.
Duart es el primer personaje en hablar de estos aspectos en nuestro medio. Y vendrán muchos otros.
¿Pedro Pablo Duart le apuesta al turismo?
sSi, efectivamente tuve la oportunidad de ser funcionario público y ser gobernador de la provincia del Guayas, conozco bien lo que hay que hacer. Lo hicimos una parte cuando tuvimos la oportunidad de hacerlo, de servir, y ahora de candidato a la alcaldía de Guayaquil porque creemos y hay mucho que hacer por Guayaquil.
Hay que rescatar la identidad de sentirnos orgullosos de ser guayaquileños y sacar a la ciudad adelante frente a tantos problemas que tenemos, uno de ellos la delincuencia que, sin lugar a dudas, impide que la ciudad se desarrolle.
Sin seguridad no hay vida, no hay progreso y sin progreso no hay turismo, porque lo que tenemos que hacer es brindar la seguridad que nos merecemos o recuperar los espacios públicos.
Gran parte de lo que está pasando es porque las autoridades han cedido los espacios públicos a los delincuentes. Más bien lo que debemos hacer es adueñarnos de la ciudad.
¿Cómo sería adueñarnos de Guayaquil?
Preparando y dándoles funciones claras a la Policía Metropolitana para que salga a combatir la delincuencia y no solo a lo que se dedican, lamentablemente, que es perseguir a trabajadores informales.
Segundo, creando el ambiente necesario y propicio para poder generar nuevos negocios. Nosotros vamos a hacer un plan para todos los hoteles, restaurantes y cafeterías, eso va a fomentar el turismo, la gastronomía y crear plazas de trabajo. Ellos podrán recibir descuentos tributarios, subvenciones tributarias para que puedan ellos, de alguna forma, premiar los nuevos emprendimientos que es lo que más queremos hacer en lugares como estos.
Una ciudad que se desarrolla dándole la espalda a lo que nosotros tenemos aquí, el río Guayas, un lindo río, precioso. Hay que reactivarlo y eso es también una manera de hacer turismo. Nosotros vamos a implementar un programa de transporte fluvial que va a complementar el servicio de transporte y también será turístico para que la gente pueda navegar sobre el río. Eso vamos a impulsar y crear.
También para los jóvenes un instituto tecnológico municipal, donde se van a poder preparar, capacitar, administrar negocios y saber de ventas. Guayaquil es eso, Guayaquil es turismo.
Otra cosa que vamos hacer y es importante en una ciudad que no reconoce y no recupera su identidad del Casco Histórico, el centro de la ciudad de Guayaquil, que lamentablemente hay que decirlo, está completamente abandonado. Uno recorre por la noche la 9 de Octubre y se va a encontrar, sin exagerar, con más de 5.000 indigentes que duermen todas las noches allí porque no tienen un lugar para dormir y para alimentarse.
Entonces, recuperando el Casco Histórico, brindándoles toda la seguridad a las personas, implementando un servicio de transporte fluvial, brindando subvenciones para los nuevos comercios en hotelería, cafeterías y restaurantes se va a dinamizar la economía.
Hay que reconocer cosas buenas que se han hecho, en este caso la calle Panamá, cómo se la transformó. Así hay que recuperar el centro. Hay que brindar las condiciones para que la gente emprendedora pueda invertir y poder nosotros, de cualquier forma, generar lo que queremos.
Mire estamos en un lugar cuando se celebró la final de la Copa Libertadores (Puerto Santa Ana), gestión del Gobierno Nacional y gestión de la Alcaldía. Eso es algo bueno. Miremos cómo se dinamizó esto y miremos qué bonito fue ver cómo había todas las garantías para el turista, había seguridad. Pero ahora que ya se acabó la copa, ¿por qué ya no existen las mismas garantías?
La final de la Copa Libertadores le permitió a Guayaquil demostrar su capacidad de atención a los visitantes.
¿Cómo aplicar y fortalecer el uso del transporte fluvial?
Generado ofertas, brindando las condiciones para que lo puedan hacer, creando la infraestructura para crear muelles como nosotros lo estamos planificando, porque dentro de nuestro plan de trabajo tenemos contemplado la implementación de varios muelles para crear la infraestructura y también generar la oferta.
En México, eso genera muchos recursos económicos porque la gente lo disfruta y goza en una pequeña embarcación para movilizarse de un lado a otro. Nosotros tenemos Durán, Daule, Samborondón y el gran Guayaquil, el problema es que no se lo ha planificado y hay que crear el ambiente necesario y el ecosistema necesario para hacerlo.
Mire usted, tenemos aquí un Estero Salado precioso que está en medio de toda la ciudad. Sin embargo, está todo descuidado, está echado a menos, está perdido y hay que rehabilitarlo, rescatarlo y volver a crear el ambiente necesario para oxigenar el Estero Salado y dragar una parte que está lleno de basura.
Nosotros estamos presentando un plan integral para recuperar la ciudad de Guayaquil, donde se cubran y puedan establecer los mecanismos necesarios para crear el Guayaquil que queremos, el Guayaquil del futuro, el Guayaquil de oportunidades, un Guayaquil donde venga el turista y el turista se sienta seguro, porque lamentablemente Guayaquil está ahora como una de las ciudades más peligrosas en el mundo.
La Embajada de Estados Unidos recomienda a los turistas que tomen las precauciones y prácticamente que tengan cuidado y que no vengan a Guayaquil por toda la peligrosidad que vemos cuando nos exponemos cada día.
Nos enfocaremos trabajando principalmente en la seguridad, controlando la seguridad y brindando la seguridad al turista que viene aquí, que pueda venir a invertir aquí y que sin lugar a duda tienen un magnífico paisaje para que lo puedan aprovechar.
¿Qué hacer en cuanto a la inseguridad que atraviesa Guayaquil?
Dirigentes gremiales y operadores turísticos exigen control en un panorama sombrío por la inseguridad.
Poniendo mano dura, caiga quien caiga, haciendo respetar los derechos humanos de los ciudadanos, luego de los delincuentes, poniendo a trabajar a la Policía Metropolitana para en lugar de perseguir a los comerciantes se los vea patrullando las calles o avenidas de Guayaquil las 24 horas de los siete días de la semana y en doble turno.
Lo que estamos viviendo que realmente es muy preocupante y eso es ocasionado por los políticos corruptos que estando en el poder han hecho poco o nada.
Tenemos que dejar a un lado los egos políticos, las rivalidades y más bien empezar a pensar en función de la ciudad y del país. Nada ganamos entre una pelea de Gobierno y Alcaldía, nada. Estamos cansados del berrinche y bochinche, ya es hora de ponernos a trabajar.
Tendríamos que analizarlo. Tendríamos que verlo pero se lo puede hacer, porque hay otros cantones que lo tienen más bajos y eso genera competencia.
Mire usted Daule, mire usted Quito, ellos pagan menor tasas de impuesto. Se lo puede hacer porque cuando hay voluntad se puede hacer eso y mucho más.
¿Cómo debería hacerlo Guayaquil, si la seguridad es competencia del estado central, de la Asamblea Nacional?
La entrevista con el aspirante a la alcaldía de Guayaquil se realizó en Puerto Santa Ana, en New York cofee bar.
Uno no escoge la competencia por conveniencia, la urgencia, mejor dicho es que nos están matando afuera.
Usted me podrá decir, bueno es que no tiene la competencia la Alcaldía de Guayaquil, pero uno no escoge la competencia por conveniencia sino por urgencia y esa es la urgencia.
Se lo puede hacer. Analicemos que hay toque de queda, nos mandan a todos a la casa, se perjudica al turismo, baja las ventas, la gente tiene miedo de recibir un impacto de bala y lo que hace el empresario es despedir a los trabajadores porque caen sus ventas y eso no es justo, se lo puede remediar.
Hay que hacerlo, esa es la forma como se saca pero tenemos que adueñarnos del espacio público. Usted va a un parque Centenario, por ejemplo, usted se encuentra gente vendiendo droga, pleno sábado 10:00 u 11:00. Entonces, dónde está la Policía Metropolitana, dónde está el involucramiento de la empresa privada como existía antes.
Antes los parques estaban por seguridad que se le daba a cada banco. Cada banco tenía apadrinado los parques de la ciudad de Guayaquil, así funcionaba y mire como se lo rescató, porqué no volvemos a lo mismo.
La ciudad está en una especie de abandono y eso es lo que tenemos que recuperar. Tenemos que salir adelante si, podemos salir adelante, lo vamos hacer sí, lo vamos hacer cuando ganemos la alcaldía de Guayaquil.
¿Qué hacer para reactivar el Centro Histórico de la ciudad?
Los edificios patrimoniales que se están cayendo, que se están desplomando hay que hacer un inventario y ver el procedimiento de la estructura para ver cómo están.
El proceso es el siguiente, primero hacerlo óptimo para que la gente pueda visitarlo a pie, caminando como en todas las ciudades del mundo. Nosotros vamos a proponer la construcción de edificios de parqueos para que la gente tenga un lugar para dejar su carro, que es el grave problema que tenemos cuando vamos al centro. Y vamos a poner un circuito cerrado de buses eléctricos para que la gente se pueda desplazar en el casco histórico gratuitamente, teniendo ya un lugar para dejar su carro.
Segundo, vamos a densificar el centro que quiere decir, la gente del centro está saliendo del centro, la gente se está yendo de Guayaquil, se está yendo a otros cantones a Durán, Daule y Samborondón porque no tiene la garantía para vivir aquí.
Tenemos que hacer que la gente regrese a Guayaquil densificando el centro, por ejemplo, y eso es muy fácil, usted le puede dar descuento en los impuestos prediales para que la gente ocupe el centro y los departamentos sean ocupados incluso por los mismos funcionarios públicos que trabajan en el centro, a menor costo. Hay que volver atractiva a la ciudad de Guayaquil.
¿Cómo hacer para mejorar el número de visitas en Guayaquil, que este fin de año llegaría a los dos millones?
Primero poniendo la casa en orden. Quién va a querer venir cuando un propio Gobierno importante como lo es los Estados Unidos le dice a los ciudadanos que tengan cuidado porque los pueden matar cuando vienen. Entonces, primeramente hay que dar la garantía y la seguridad necesaria para que el turista venga y esté en paz.
Número dos. Si las cosas se han hecho bien, lo aplaudo, lo celebro, pero siempre se puede mejorar, siempre se puede salir adelante.
Hay que promocionar a Guayaquil, hay que llevarlo a ferias internacionales para que se pueda vender, hay que captar el turismo no solo para que vengan de escala para ir a Galápagos, sino para que se queden aquí.
Nosotros vamos a poner en un sector de la ciudad de Guayaquil un gran espacio para poder construir un lugar y poder hacer conciertos. Dónde se realizan los conciertos aquí en Guayaquil, no hay, porque se van a Daule al sector de El Dorado, allá los impuestos no son altos. Aquí en Guayaquil, nosotros vamos a bajar esa tasa para poder atraer importantes eventos.
Mire usted en Quito hace unos días se presentó Bad Bunny, y no se lo trajo acá a Guayaquil porque los impuestos son caros. Si usted baja los impuestos, baja esas tasas, usted hará más atractivo a Guayaquil para que no tengan que irse a Daule por factor de parqueo e infraestructura.
Vamos a construir un gran espacio para que podamos hacer de Guayaquil lo que queremos, ese lugar que siempre ha querido ser y está en las mejores ciudades de Latinoamérica en el mundo.
Hay que fomentar el arte como una parte para atraer turistas por eso vamos a crear un Teatro Municipal en el sector de Monte Sinaí y el sector del sur para que más gente pueda tener entretenimiento sano.
¿Cuál sería esa baja en los impuestos?
Tendríamos que analizarlo. Tendríamos que verlo pero se lo puede hacer, porque hay otros cantones que lo tienen más bajos y eso genera competencia.
Mire usted Daule, mire usted Quito, ellos pagan menor tasas de impuesto. Se lo puede hacer porque cuando hay voluntad se puede hacer eso y mucho más.
¿Guayaquil puede ser el epicentro para llevar turistas a Playas, Salinas y otros balnearios?
A 26 kilómetros de Guayaquil está Punta Diamante, un atractivo turístico de la parroquia Chongón.
De acuerdo, pero Playas es otro cantón y Salinas es otra provincia. Pero tenemos la isla Puná, una isla que tiene un potencial magnifico, brutal.
Se deben hacer lugares para que la gente pueda tener un desarrollo ordenado, se deben hacer universidades o centros de estudios para ayudar que la gente se fomente y toda la gente que está incluso en la otras parroquias rurales cercanas se puedan capacitar allí y declarar zona cero de impuestos para todas las acciones que se vayan a realizar allí, evidentemente con un orden respetando el desarrollo.
Hay que hacerlo, Guayaquil tiene muchísimos lugares para poderlo explotar. Si se lo ha hecho, se lo va hacer aún más para mejorar y de eso se trata, siempre podemos mejorar.
¿Cómo ha estado el trabajo del Gobierno y Alcaldía en cuanto a materia turística?
Mire lo que está pasando hay un toque de queda y estado de excepción. Tenemos que estar ya a cierta hora en casa resguardados porque llevamos 1.200 muertes violentas. No creo que haya respuesta.
¿Cuál es su llamado a la ciudadanía para que escuche propuestas que le apuestan al turismo?
Esta es nuestra propuesta que nosotros presentando dentro de nuestro plan de trabajo. Y los animo a que ingresen a nuestra página web https://pedropablo.ec/ un plan de trabajo que hemos venido construyendo con la ciudadanía en estos dos últimos años donde he tenido la oportunidad de servirlos en diferentes programas de educación de educación y seguridad y lo que queremos es transformar la ciudad de Guayaquil.
Guayaquil no aguanta más, necesitamos gente nueva, gente con nuevas ideas que venga a refrescar la manera de hacer política y al no tener a los ciudadanos mendigos regalándoles un kit de alimentos cada cierto tiempo y una camiseta cuando se vienen las elecciones, sino darle las herramientas necesarias para que puedan triunfar. (I)
