El cuy originario de los Andes. En San Gabriel es uno de los símbolos de su gastronomía y cada año se desarrolla un festival del cuy asado, muy concurrido.

POR RICARDO CABEZAS MOSQUERA

El cuy es un símbolo clave de la gastronomía de San Gabriel, provincia de Carchi, a tal punto que tiene su propio festival. Más de 400 ejemplares son asados al aire libre, en la calle Colón, junto al parque González Suárez, este sábado 11 de mayo de 2024, desde las 09:00, en el principal anillo de esta ciudad patrimonial ubicada a 197.9 km de Quito.

Esta iniciativa, organizada por la Municipalidad de Montúfar, ha logrado posicionarse en el calendario gastrodiverso de la frontera colombo-ecuatoriana, donde este platillo andino tiene una alta demanda.

Tiene su propio festival 

Montúfar gastrodiverso.

El cuy era en el pasado parte esencial como ofrenda en el momento de las fiestas. Hoy se lo comercializa.

El Festival del Cuy Asado de este 11 de mayo es la mejor opción para celebrar a la madre en su día. Guisanderas de 17 asociaciones agro productivas de la ruralidad, encienden las brasas de improvisados fogones en la calle Colón, junto al parque González Suárez en el primer anillo patrimonial central de San Gabriel, cabecera cantonal de Montúfar.

Más de dos mil comensales arriban a esta ciudad, séptimo Pueblo Mágico del Ecuador, donde avistan  cómo se efectúa la preparación de 400 cuyes al carbón.

El cuy asado de San Gabriel tiene como características especiales el adobo, sabor y preparación tradicional; así como el aderezo con especies nativas y los secretos culinarios de las abuelas de este sector. Se sirve acompañado de papas cocidas, sarsa (así se llama a la salsa), canguil, ají y una refrescante jarra  de chicha.

Hombres y mujeres sentados frente al fuego, giran por más de una hora las horquetas de madera donde son colocados los pequeños mamíferos, hasta lograr la cocción perfecta y una piel crujiente.

Adobo propio y piel crocante 

Para Raúl Lucero, alcalde de Montúfar, degustar un cuy al aire libre, sobre las carpas que se instalan en este corredor gastronómico, es la mejor ocasión para festejar en familia a las madres. "Uno de los propósitos de esta tradición es impulsar la economía de los emprendedores gastronómicos de Montúfar", agrega la autoridad, quien anuncia que se premia al sabor.

Teresa Fuelantala, de la Asociación “Salvemos El Bosque de Los Arrayanes”, cuenta  que la preparación en su comunidad se hace de forma artesanal. "Un día antes la carne es adobada con especias naturales, al día siguiente se prepara el carbón para hornear los cuyes por más de una hora hasta lograr que estén crocantes.

Edison Jiménez, técnico de Turismo de la Municipalidad de Montúfar, explica que generalmente se comercializan 400 cuyes a un valor promedio de entre los $17 y $20, dependiendo del peso.

Beneficios para la salud

Los turistas optan por el consumo de este tipo de carne magra por el contenido de grasa, tiene un alto contenido de proteínas y es baja en colesterol y sodio. Los nutricionistas sostienen que es ideal para incluirla en una alimentación variada y equilibrada apta para todos los grupos poblacionales.

Los extranjeros, cuando avistan por primera vez un cobayo como también es conocido, no salen del asombro; sin embargo, una vez que prueban este producto cárnico quedan fascinados.

Carmen Revelo, vecina del barrio Santa Clara señala que es cocido con exquisitos condimentos naturales de la zona. Agrega que es servido acompañado de papas, sarsa, canguil, ají y una deliciosa jarra de chicha.

Esta carne es consumida principalmente como plato típico asado, en locro o en ceviche en Perú, Ecuador, Colombia y Bolivia, ya que es muy sabrosa, suave, con alta calidad nutritiva y de fácil digestión.

Tiene una serie de beneficios para la salud humana, ya que es fuente de proteína, con hierro y vitamina B12, colocándolo como un excelente alimento dietético.

Los expertos en gastronomía coinciden en señalar que la carne de cuy se clasifica como Tipo I, pues su contenido de grasa es inferior al 15 % y el de proteína es superior al 14 %.

Se reactiva el turismo local 

Montúfar gastrodiverso.

El Museo de las Artesanías, rescata los oficios que fueron parte de la convivencia en San Gabriel y todo Montúfar.

Paralelamente al Festival del Cuy Asado, en San Gabriel se realiza una segunda feria que muestra una decena de stands,  artículos y productos alusivos a la fecha, confeccionados por emprendedores locales a precios cómodos, permitiendo a los visitantes acceder a obsequios para regalar a las madres y a todos, explica Jiménez.

Los viajeros aprovechan la visita para conocer el bosque de Los Arrayanes, la Cascada de Paluz, la Gruta de La Paz, la laguna El Salado, que están a pocos minutos del casco histórico de San Gabriel.

En la parte urbana, las 400 edificaciones   patrimoniales con construcciones y fachadas centenarias son parte de los atractivos a conocer.

Los museos de  Arqueología, Artesanías, Fauna Silvestre, y Costumbres Funerarias, son la nueva opción para el turismo. Este itinerario de identidad gráfica y vivencial acaba por  convertir a San Gabriel en la Ciudad de los Museos.

El festival del cuy, más que un pretexto para conocer y visitar este cantón carchense, donde el caldos, el  hornado pastuso, el caldo de gallina criolla, la trucha frita y al vapor, la bandeja pastusa con  fritada, los dulces de frutas silvestres con cuajada, el queso con papas, entre otros platos, invitan a disfrutar el Montúfar gastrodiverso. (I)

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