La parroquia Balsapamba, que pertenece al cantón San Miguel de Bolívar, es conocida como la tierra de los balnearios. Está a unas dos horas de Guayaquil y casi el mismo tiempo de Guaranda, por lo que es como un punto de encuentro entre turistas de la Costa y de la Sierra.
Desde Montalvo, cantón de Los Ríos, hasta Balsapamba hay 14 km de distancia. Esa ruta es como el abreboca para lo que hay en Balspamba, pues funcionan algo más de una decena de balnearios, tanto naturales como construidos por emprendedores e inversionistas de la zona. Y eso, en un ambiente subtropical con temperaturas promedio de 22°C.
Ya en la parroquia, en el sector El Cristal, rodeado de montañas que anuncian la transición entre la Costa y Los Andes, se localiza el parque acuático Josefina Barba, un complejo creado en el año 2002 por la Prefectura de Bolívar. Es el ícono de esta zona.
El parque acuático está a orillas del río Cristal, cuyas aguas frías descienden entre rocas y pozas.
Un gran chapuzón
El parque acuático Josefina Barba es un destino que en los feriados y fines de semana permanece lleno de bañistas.
Estar en el parque acuático es sinónimo de diversión, especialmente para los más pequeños de la casa, asegura Víctor García, gerente de la Empresa Pública de Turismo de Bolívar. Recalca que todos los fines de semana pasan copadas las piscinas.
La parte más fascinante es escuchar los gritos de “ola, ola, ola”, producto de la activación del sistema mecánico que produce olas artificiales en la piscina más grande del complejo Josefina Barba.
García dice esa marea artificial se extiende en un ancho de ola de 24 metros, los cuales se agitan a pocos metros de la piscina, que tiene, además, dos toboganes, otra piscina con juegos infantiles y una cuarta con chorros de agua que vierten desde una cubeta ubicada en la parte alta.
“Sus aguas limpias y la amplitud para que los bañistas se den su respectivo chapuzón es nuestra carta de presentación. Siempre estamos innovando con nuevos espacios de relajación y libre disfrute. Vengan por una experiencia inolvidable”, exterioriza el gerente.
Recreación y descanso
Uno de los administradores del parque acuático detalla que este cuenta con zonas de confort y relajamiento, como sauna, turco, hidromasaje, bar restaurante, tienda de artesanías, vestidores, áreas verdes, servicio de salvavidas, cancha deportiva y pista de baile.
El ingreso a los espacios de relajamiento tiene un valor adicional entre $ 2 a $ 5, dependiendo su uso. En el caso de las áreas verdes, de descanso y diversión se acomodan para todo el público; por ejemplo, a los costados de las piscinas se ubican cabañas con sillas, mesas, mecedoras y en algunos casos hamacas.
En complejo dispone de un bar restaurante, en donde se preparan tortillas de maíz, pollo frito, seco, chigüiles, entre otros aperitivos y bebidas, que van desde $2.50 hasta $ 6.00. También a la entrada del parque hay comedores.
Hay servicio de hospedaje para al menos 20 adultos y 15 niños, a $ 12 por persona. Quienes lo hacen, tienen acceso hasta altas horas de la noche a las piscinas y zonas de confort. Todo esto con reservación.
Valor de la entrada
- Adultos, $ 4.
- Niños desde 6 años, tercera edad y personas con capacidades especiales, $,2.00.
Horario de atención
- Uso de piscina sin olas, lunes y martes de 08:00 a 17:00.
- Servicio completo, de miércoles a domingo y feriados, de 08:00 a 17:00.
¿Cómo llegar?
Desde Guayaquil, por la ruta Yaguachi-Jujan-Babahoyo-Montalvo. Desde aquí hasta Balsapamba se aprecian los balnearios y hosterías disponibles.
En bus interprovincial se puede ir en los que van a Guaranda, con un pasaje de $ 5.
Reservaciones
- Llamar a los número (03) 298-2190 / 0989084110 o contactarse al correo empublica@yahoo.com (I)
Galería de las instalaciones
Ingreso al parque
Saunas
Toboganes
Olas artificiales
Shows musicales
Tienda de artesanías
Otra piscina
Patio de comida
Otros atractivos turísticos para visitar en Balsapamba
12 kilómetros con opciones
El complejo Camino al Sol, ubicado entre Montalvo y Balsapamba, ofrece una piscina con aguas color turquesa.
La ruta de los balnearios o complejos turísticos empieza desde el cantón Montalvo, provincia de Los Ríos, en una vía asfaltada de 12 km hasta Balsapamba. Sandro Vargas, promotor turístico, opina que se trata de un recorrido por un encanto natural rodeado de paisajes, con ríos, tradiciones y culturas por descubrir.
En jurisdicción del cantón Montalvo están los balnearios que se forman con las aguas de los ríos La Esmeralda y Cristal, este último se conecta con Balsapamba.
Vargas menciona que cerca del río Cristal hay balnearios privados y de fácil acceso, tal es el caso del complejo ecoturístico El Refugio, que dispone de dos fases de recreación. La primera, piscinas de roca artificial, toboganes, canchas deportivas, restaurante y pista de baile; la segunda, el área de paz y conexión con la naturaleza.
Otro de los balnearios es el complejo Pisagua, en el kilómetro 3 de la vía Montalvo - Balsapamba. Tiene siete piscinas y un tobogán de 45 metros de altura.
Además está el complejo turístico Camino al Sol, localizado en el kilómetro 5 de esa vía, al margen izquierdo, un sitio concurrido por sus piscinas de rocas artificiales, cabañas de descanso y una zona de camping.
Los 25 saltos de agua
La cascada Milagrosa, en Balsapamba, es el destino de los paseos dominicales de visitantes de Sierra y Costa.
Balsapamba y su ruta de los saltos de agua es otra de las alternativas para hacer turismo. El trayecto al complejo de cascadas toma una hora. Se recorren pequeñas quebradas y las riberas de los afluentes El Tingo, El Vergel y Cristal.
Jorge Rivera, guía local, detalla que en el camino, la primera cascada es la de San Joaquín, con un salto de agua de 60 metros. A continuación, el chorro Cara del Diablo, de 12 metros; el Tobogán, de 10 metros; las Gemelas, de 6 metros; Cañón, de 30 metros, y la Peña, de 25 metros.
Rivera explica que las aguas no son torrentosas y permiten la práctica del canyoning y el descenso por las cascadas. Los guías locales cuentan con equipos de protección, además a los turistas se les entrega ropa de neopreno, botas y zapatos para el agua.
Ramiro Rugel, otro de los guías, invita a visitar el centro de Balsapamba, además de los balnearios. Allí están las chorreras Mariposa Azul, un espacio idóneo para conectar con la naturaleza y renovar energías positivas.
Las cascadas de Copalillo, disponibles en verano, son otra opción; mientras en Limón Bajo, entre el espeso bosque se encuentran hasta 25 saltos de agua, cuevas y playas.
Junto a la carretera está la cascada Milagros, con 15 metros de altura, cuya fuerza y minerales le han atribuido propiedades curativas.
Gastronomía y hospedaje en Balsapamba
Los más ricos platos
Balsapamba goza de un clima templado y tierras fértiles para las cosechas de naranja, con las que se hacen vinos.
Andrea Cañar, comerciante, señala como experiencia excepcional la de comer lo chigüiles calientes con una deliciosa taza de café pasado.
Asimismo es imposible no beber o llevar como recuerdo una botella del inigualable vino de naranja, que se sirve como aperitivo, bajativo o para condimentar alguna receta.
Cañar detalla una variedad de platos típicos que se sirven en la zona, como los tamales, mote, fritada, papas, cuyes, caldo de gallina, empanadillas de trigo rellenas de queso, dulce de zambo, tortillas de trigo y otros manjares. Los precios varían dependiendo del producto.
Hospedaje
En caso de querer pasar una jornada de descanso lejos de casa, los turistas que viajan desde la Sierra pueden quedarse en San Miguel de Bolívar o San José de Chimbo y hospedarse allí como un punto de partida que los direccione hacia los balnearios de Balsapamba.
Para los visitantes de la Costa pueden tomar la opción de pernoctar en Babahoyo y Montalvo. Ambas opciones considerando que Balsapamba es un destino para disfrutar una mañana y un poco de la tarde para luego desplazarse hacia su lugar de origen o zonas cercanas con descanso.
Cualquiera de las dos localidades citadas disponen de sitios de hospedaje que cobran entre los $ 15 y $ 25 por persona la noche. Varía acorde a los servicios de los establecimientos turísticos. (I)
